El cardenal Muller dice que no es momento de pensar en un sucesor con el papa ingresado
“El papa está vivo ahora y este es el momento de rezar, no de pensar en quién será su sucesor. Y si hay alguien que piensa en el futuro mientras el papa está en el hospital, no es bueno, no es bueno en absoluto”, asegura el cardenal Gherard Ludwig Müller
El cardenal Gherard Ludwig Müller, de 77 años, exprefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, quien ha sido un referente para los críticos del papa Francisco, afirmó que “no es el momento de pensar en un sucesor” mientras el pontífice se encuentra hospitalizado.
“El papa está vivo ahora y este es el momento de rezar, no de pensar en quién será su sucesor. Y si hay alguien que piensa en el futuro mientras el papa está en el hospital, no es bueno, no es bueno en absoluto”, asegura en una entrevista publicada recientemente en el diario italiano Corriere della Sera.
El papa argentino, de 88 años, está en estado crítico en el hospital Gemelli de Roma, donde fue ingresado el 14 de febrero por una neumonía bilateral, bronquitis e infección polimicrobiana.
Müller, quien ha mantenido una postura opuesta a la visión de Francisco, añade: “Cuando el sucesor de Pedro termina su vida terrena, los cardenales se reúnen, deben hablar entre ellos y discutir sobre el futuro. Ésta es su tarea esencial. Pero anticiparse, mezclarlo todo, preguntarse si el próximo papa será ‘progresista’ o ‘conservador’ es un contratestimonio de nuestra fe”.
A medida que el papa continúa en el hospital, han surgido rumores sobre reuniones de cardenales para preparar un posible cónclave.
“Mira, yo no me ocupo de eso, me mantengo al margen de todo esto. Soy teólogo y me interesa la espiritualidad cristiana, no el poder. Nosotros, cardenales y obispos, tenemos la tarea de servir al pueblo, de ocuparnos de la salvación de las almas. Si hay alguien que está interesado en juegos de poder, no está dando un testimonio cristiano”, añade el cardenal alemán.
El purpurado también explica: “Conozco al papa Francisco desde hace mucho tiempo, hay un vínculo personal, afectivo. Debemos orar por él, por su sanación, sabiendo que todo está en manos de Dios y no podemos cambiar la situación. Además, en este momento es importante que ante todo nosotros, los cardenales, demos testimonio de nuestra fe”.
Sobre si los cardenales han recibido alguna información confidencial recientemente, Müller asegura que “no hay noticias confidenciales”.
“Sabemos lo que se explica en los partes del Gemelli y por otro lado no somos expertos médicos, tenemos que aceptar lo que está escrito. Pero añade: ‘Estamos preparados para todas las posibilidades’.”
