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La crisis por combustible comienza a golpear los bolsillos de la población y más sectores se declaran en emergencia

La crisis por combustible comienza a golpear los bolsillos de la población y más sectores se declaran en emergencia

Existen dificultades para trasladar alimentos de zonas productivas a centros de abasto y de consumo, con el pasar de los días nuevos sectores han sacado a relucir sus dificultades frente a esta situación

Bolivia cierra una semana en la que el gobierno de Luis Arce Catacora admitió por primera vez que no puede satisfacer la demanda de combustibles, atribuyendo esta situación a la falta de dólares necesarios para las importaciones. Las consecuencias de esta crisis comienzan a afectar financieramente a la población y a diversos sectores, que han señalado los problemas que enfrentan debido a este contexto.

Una vez reconocido el actual escenario del país, las colas en las estaciones de servicio no han cesado, lo que ha generado un estado de intranquilidad palpable entre distintos sectores del aparato productivo nacional. Estos han comenzado a advertir dificultades para trasladar sus productos a industrias o a los centros de consumo, como es el caso de los agricultores de los Valles cruceños.

Un recorrido por centros de abastecimiento en Santa Cruz mostró a los comerciantes reflejando una disminución en la llegada de alimentos para la venta, así como el encarecimiento de diversos productos. Esta situación también se evidenció en los mercados del occidente, donde se ha registrado un aumento en los precios de productos esenciales como la carne de pollo, el aceite y el arroz.

Además, se ha observado una reducción en la frecuencia del servicio de transporte público, con menos buses disponibles, lo cual ha provocado que muchas personas no pudieran llegar a tiempo a sus trabajos, y estudiantes que se quedaron sin poder asistir a clases. También se ha notado una disminución en los servicios ofrecidos por los gobiernos municipales y una caída en las ventas de negocios que dependen del día a día, según los informes recogidos a lo largo de la semana.

“El Gobierno mintió a la población boliviana, porque la escasez de combustible nunca fue consecuencia de sobredemanda ni de bloqueos, es un problema de iliquidez, por ende, por falta de capacidad de pago (…) El modelo económico del país debe cambiar, pues está demostrado que el actual modelo impuesto es un rotundo fracaso”, fue la demanda central del Comité multisectorial.

A pesar de este anuncio, para la próxima semana hay sectores que han establecido un plazo al Gobierno para abordar esta problemática. Las cooperativas mineras, por ejemplo, dieron 72 horas (a partir de este lunes) para encontrar una solución. Además, los cívicos han convocado una Asamblea de la Cruceñidad para los próximos días, y otros sectores como el ganadero también planean reunirse de emergencia.

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