Gobierno niega que Bolivia vaya camino a una estanflación y atribuye la subida de los precios a los bloqueos
El economista Gonzalo Chávez explicó que la estanflación combina inflación elevada y desaceleración de la economía que podría terminar en una recesión, es decir, una economía con valores negativos
Tras el cierre de Bolivia en 2024 con una inflación cercana al 10%, el viceministro de Planificación, David Guachalla, desmintió que el país se dirija hacia una estanflación. Argumentó que el aumento de precios experimentado durante el año pasado se atribuye, en gran parte, al bloqueo evista, la especulación, así como a factores climáticos e inflación importada.
Esta declaración se produce luego de que el economista Gonzalo Chávez advirtiera que Bolivia se dirige a una estanflación, un fenómeno que combina alta inflación y desaceleración económica que podría desembocar en una recesión, caracterizada por valores económicos negativos.
El viceministro explico que “la inflación se debe en gran medida a los efectos de los bloqueos y la especulación derivada de la misma y de los efectos climáticos que afectaron al aparato productivo. Si quitamos esos efectos en este cálculo, la inflación no debería haber superado el 5%”.
En esta misma línea, Guachalla indicó que existe una estimación para contrarrestar esta tendencia, ya que se prevén mejores proyecciones climáticas, lo que se traduce en un mejor desempeño del aparato productivo y, como consecuencia, un mayor crecimiento económico.
Sin embargo, Chávez mencionó que, además del aumento de precios en varios segmentos, el aparato productivo ha ido disminuyendo desde 2014 a un ritmo acelerado, lo que también impacta el crecimiento económico.
En un escenario de estanflación, según el analista, tanto el aparato productivo formal como el informal tienden a desactivarse, lo que conlleva una reducción en la cantidad de empleos y un significativo crecimiento del sector informal, caracterizado por ocupaciones de mala calidad y trabajos extremadamente precarios.
Esto, a su vez, afecta directamente el bienestar de la población. La estanflación es un fenómeno económico muy complicado de abordar y no se soluciona mediante parches de política económica, sino que requiere de soluciones integrales.
