Saucedo jura como presidente del TSJ: “La justicia no debe estar sometida a ningún tipo de poder, ni político, ni económico”
El cruceño Romer Saucedo fue posesionado como presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y este martes tomó juramento en el cargo, en la apertura del Año Judicial 2025.
Sin la presencia de los miembros prorrogados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) ni del presidente Luis Arce, el juramento de Romer Saucedo como nuevo presidente de esta instancia judicial tuvo lugar el martes. Saucedo fue elegido por los otros seis magistrados que ganaron en los comicios del 15 de diciembre.
En su alocución, Saucedo expresó su gratitud a la población por el apoyo recibido en las urnas y destacó la legitimidad que conlleva este acto. Además, subrayó que asume un compromiso para mejorar el sistema judicial en beneficio de la ciudadanía, liberándose de cualquier interés personal.
La independencia de poderes es un punto importante. Hemos jurado mantener la independencia del Órgano Judicial. Una Justicia independiente es la que servirá al pueblo, la Justicia no debe estar sometida a ningún tipo de poder, ni poder político, social, ni económico, la justicia debe ser como un árbitro, cobrar la sanción que debe cobrar y castigar a quien se deba, dijo Saucedo.
Con la toma de posesión de Saucedo, se dio inicio al Año Judicial 2025. En el acto estuvo presente el fiscal general del Estado, Roger Mariaca.
Además, Saucedo enfatizó que solo se someterán al estricto cumplimiento de la Constitución y lo que dictan las normas. Afirmó también que es crucial mantener buenas relaciones interinstitucionales, ya que a través de la cooperación se puede mejorar el sistema del Órgano Judicial y así evitar que la burocracia obstaculice el avance de los procesos, facilitando respuestas rápidas a los ciudadanos, incluso a través del celular.
Saucedo asumió como presidente del TSJ para la gestión 2025 en este órgano, que es la máxima instancia de la jurisdicción ordinaria, encargándose de impartir justicia en diversas materias como civil, comercial, familiar, de niñez y adolescencia, tributaria, administrativa, laboral y de seguridad social, así como en asuntos de anticorrupción y penal, entre otros que indique la norma.
Este tribunal también tiene competencias en casos de extradición, revisiones extraordinarias de sentencias y recursos de nulidad. Posee la autoridad para anular sentencias que hayan infringido derechos o garantías establecidas por la Constitución Política del Estado (CPE) o tratados internacionales.