FMI prevé que Bolivia crecerá un 1,6% en 2024, por debajo del promedio de Latinoamérica
La proyección del FMI está lejos de lo perspectiva del Gobierno que espera que la economía boliviana alcance el 3,7% este año.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) publicó este martes 22 de octubre su informe anual sobre la economía global (WEO por sus siglas en inglés), en el cual confirma las estimaciones de crecimiento económico para Bolivia que se sitúan en torno al 1,6%, cifra que se encuentra por debajo del promedio regional.
De este modo, el FMI reafirma las proyecciones que fueron anunciadas en abril, cuando se presentó una cifra similar, que está por debajo de las expectativas del Gobierno, que estima que la expansión de la economía alcanzará el 3,7% este año.
Según el informe del organismo internacional, América Latina y el Caribe sigue la tendencia general: el crecimiento económico decrece del 2,2% en 2023 a 2,1% en 2024, antes de repuntar a 2,5% en 2025.
Para 2024, se prevén los siguientes crecimientos en la región: Brasil 3%, México 1,5%, Colombia 1,6%, Chile 2,5%, Perú 3%, Ecuador 0,3%, Venezuela 3%, Bolivia 1,6%, Paraguay 3,8% y Uruguay 3,2%. En contraste, Argentina, la tercera economía más grande de América Latina, continuará con la tendencia recesiva del año anterior, anticipando una contracción de 3,5% para 2024.
“Las últimas proyecciones de crecimiento del FMI. ¿Recuerdan cuando Bolivia presumía de tener la “medalla de oro de crecimiento” en la región? Pues el modelo no cambió ni hay crisis económica internacional, como aduce el régimen. Solo estamos tan mal o peor que México y Colombia”, señaló al respecto el economista Mauricio Ríos García.
El presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, opinó que más allá de la crisis fiscal, que conlleva sus consecuencias inflacionarias y otras, la situación se torna más complicada por los actuales bloqueos que se viven en el país.
Por otro lado, el FMI indica que la economía mundial experimentará un crecimiento del 3,2% este año y el siguiente, eligiendo la prudencia en sus proyecciones debido a la desaceleración en países emergentes como China, México o Rusia.
El FMI expresó su preocupación por el aumento de la incertidumbre a nivel global, provocada por la multiplicación de riesgos tanto geopolíticos como económicos, en especial la ralentización económica observada en China.