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Irán afirma que tiene el “deber de defenderse” tras los bombardeos israelíes

Irán afirma que tiene el “deber de defenderse” tras los bombardeos israelíes

El ataque dejó cuatro militares muertos, según el último balance del ejército, que aseguró que solo resultaron dañados “sistemas de radar”. Los bombardeos se produjeron en un contexto de alta tensión

Irán declaró este sábado que tiene la responsabilidad de protegerse tras los bombardeos israelíes llevados a cabo en la madrugada contra instalaciones militares, lo que representa un nuevo episodio de violencia entre estos dos países adversarios y genera inquietud por una posible escalada militar en Oriente Medio.

Israel reconoció públicamente por primera vez que atacó a Irán, efectuando “ataques de precisión” en la madrugada contra instalaciones destinadas a la fabricación y lanzamiento de misiles, como respuesta al ataque iraní del 1 de octubre en territorio israelí.

Este ataque provocó la muerte de cuatro militares, según el último informe del ejército, que aseguró que el único daño registrado fueron “sistemas de radar”. Antes, las fuerzas armadas habían reportado dos muertes como consecuencia del ataque.

Los bombardeos ocurrieron en un marco de alta tensión en la región. Israel se encuentra en conflicto con el movimiento islamista palestino Hamás en la Franja de Gaza y con el grupo islamista Hezbolá en Líbano.

Ambos grupos cuentan con el apoyo de Irán, archienemigo de Israel, y forman parte del conocido “Eje de la resistencia”. La cancillería iraní comunicó que “Irán considera que tiene el derecho y el deber de defenderse contra actos extranjeros de agresión”.

El ministro de Relaciones Exteriores, Abás Araqchi, también enfatizó que “nuestra determinación de defendernos no tiene límites”. Mientras tanto, Hezbolá describió el ataque como una “peligrosa escalada” en la región, responsabilizando a Estados Unidos por completo.

El ejército iraní admitió que se efectuaron ataques contra bases militares en las provincias de Teherán, Juzestán (suroeste) e Ilam (oeste). Israel argumentó que llevó a cabo estos bombardeos “en respuesta a meses de continuos ataques” provenientes de la República Islámica.

El ejército israelí afirmó que “el régimen iraní y sus aliados en la región no han cesado de atacar a Israel desde el 7 de octubre” de 2023, haciendo referencia al devastador ataque de Hamás en territorio israelí, que desató la guerra en Gaza.

Con los recientes bombardeos, las fuerzas israelíes sostuvieron haber “completado la respuesta a los ataques de Irán contra Israel”. Se esperaba desde hace semanas que Israel reaccionara al ataque de Teherán, que lanzó a inicios de mes cerca de 200 proyectiles contra su territorio.

La República Islámica justificó su ataque como una reacción a los bombardeos israelíes en Líbano, que resultaron en la muerte de un general iraní y al líder de Hezbolá, Hasán Nasralá, a fines de septiembre, junto al asesinato en suelo iraní de Ismail Haniyeh, entonces líder de Hamás, a finales de julio, atribuido a Israel.

El portavoz militar israelí, Daniel Hagari, advirtió el sábado que si Teherán iniciaba “una nueva ronda de escalada”, se verían “obligados a responder” y que tendrían que pagar “un alto precio”. Además, el ministro de Seguridad Nacional, el ultraderechista Itamar Ben Gvir, afirmó que “tenemos la obligación histórica de eliminar la amenaza iraní de destruir Israel”.

En Teherán, Hooman, un obrero de 42 años que prefirió no revelar su apellido, comentó a AFP que estaba trabajando cuando escuchó explosiones. “Fue un ruido terrible y aterrador”, expresó. “Ahora que hay una guerra en Oriente Medio, tenemos miedo de vernos arrastrados en ella”, añadió.

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