Maduro a punto de asumir tercer mandato en Venezuela bajo condena opositora e internacional

En los alrededores del legislativo y el resto de los poderes públicos, en el centro de Caracas, fueron desplegados centenares de agentes de seguridad fuertemente armados

Nicolás Maduro asume su tercer mandato en medio de polémica

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, toma posesión de su tercer mandato consecutivo este viernes, en un contexto de acusaciones de fraude y un creciente aislamiento internacional. A pesar de esto, cuenta con el respaldo de las fuerzas armadas y el resto de los poderes del Estado.

La ceremonia de investidura ocurre un día después de que se llevara a cabo una marcha opositora, que culminó con la denuncia de un breve arresto de su líder, María Corina Machado, un hecho que el gobierno negó, calificado de “invento”. Las aspiraciones de Edmundo González Urrutia de asumir el cargo parecen irse desvaneciendo cada hora.

Maduro convocó a sus seguidores el jueves y los instó a “salir a las calles por millones” para su juramentación. “El 10 juro con Maduro por el futuro”, es uno de los lemas que se escuchan en las manifestaciones.

“Maduro no se va, se queda”, afirmó la manifestante chavista Coromoto Maguali, de 65 años.

El acto está programado para el mediodía (16H00 GMT) en la sede del Parlamento, que está bajo el control del chavismo.

En los alrededores de la sede legislativa y otros centros de poder en el centro de Caracas, se desplegaron centenares de agentes de seguridad fuertemente armados, como parte de un plan de “defensa” de Maduro. Este último ha denunciado nuevas conspiraciones en su contra, las cuales llevaron al arresto de dos estadounidenses, uno de los cuales sería agente del FBI, así como de líderes y activistas a principios de esta semana.

Washington, que niega cualquier complot, ha mostrado reconocimiento hacia el opositor González Urrutia, quien visitó la Casa Blanca esta semana. El próximo presidente, Donald Trump, se refirió a él el jueves como “presidente electo”.

Confusión y críticas tras el arresto de María Corina Machado

Machado interpuso su presencia el jueves en una protesta contra la investidura de Maduro. “Hoy toda Venezuela salió a la calle”, celebró ante centenares de partidarios, con quienes entonó el himno nacional. “¡No tenemos miedo!”, gritó, secundada por el coro de los manifestantes.

Después de su discurso, se marchó en una motocicleta. Poco después, se generó confusión por rumores de un arresto, que el gobierno desmintió calificándolo de “invento” y “mentira”. Su equipo político informó que fue “retenida por la fuerza” y luego liberada, mientras la Fiscalía lo tildó de “operación psicológica”. “Si la decisión fuera detenerla, ya estuviera detenida”, declaró el ministro del Interior, Diosdado Cabello.

Este incidente fue condenado por países tales como España, Colombia y Chile. Trump describió a Machado y a González Urrutia como “luchadores por la libertad”. Machado anunció en redes sociales que el viernes daría explicaciones sobre lo ocurrido y lo que sucederá a continuación. “Yo estoy ahora en un lugar seguro y con más determinación que nunca”, escribió en la red social X.

Un mandato marcado por retos económicos y políticos

Maduro, quien ha estado en el poder desde 2013 tras ser ungido por el fallecido Hugo Chávez, ha governado de forma autoritaria con el respaldo de las Fuerzas Armadas. Sus detractores lo han denominado “dictador”.

El sector militar es incluso más crucial que antes para determinar si sigue el gobierno de Maduro o si se podrían abrir puertas hacia una transición, según el abogado especialista en relaciones internacionales, Mariano de Alba.

González Urrutia ha instado a los militares a reconocerlo, pero la jerarquía castrense ha prometido “lealtad absoluta” a Maduro. El opositor visitó el jueves República Dominicana, en el marco de una gira internacional que debía culminar en un vuelo privado a Caracas para intentar asumir la presidencia. No hay información concreta sobre esa o cualquier otra estrategia.

Mientras tanto, Maduro promete un tercer mandato caracterizado por la “paz” y la recuperación económica, después de haber pasado parte de sus 12 años en el cargo en medio de recesión, alta inflación y escasez. Más de siete millones de venezolanos han emigrado en busca de escapar de la crisis, de acuerdo con datos de la ONU.

De cara a su próximo sexenio, propone una “gran reforma” a la Constitución, que contempla la implementación de nuevas leyes que, según analistas, restringen las libertades.