En 12 días del 2025 se registraron cinco muertes violentas en cárceles de Bolivia
Entre las cinco muertes, figuran un feminicidio seguido del suicidio del feminicida y tres muertes en medio de peleas entre reos
En el inicio del 2025, justo antes de que culminen las dos primeras semanas, se han reportado cinco muertes violentas dentro de los penales de Bolivia, de las cuales al menos dos ocurrieron en cárceles de “máxima seguridad”.
Los dos últimos fallecimientos se produjeron el domingo en el área del PC 4, un régimen abierto, en Palmasola, Santa Cruz. Se informa que los cuerpos de un hombre y una mujer fueron encontrados después de las 20:00 horas.
Las autoridades comunicaron que el hombre había estado cumpliendo, desde 2023, una condena de 20 años de prisión por intento de feminicidio. Sin embargo, la mujer ingresó al centro penitenciario para visitarlo.
La autopsia reveló que el hombre estranguló a la mujer y posteriormente se quitó la vida ahorcándose.
Los otros tres asesinatos ocurrieron en medio de disputas por el control de las cárceles.
El 3 de enero, un recluso de 36 años fue apuñalado en repetidas ocasiones en el penal de máxima seguridad de Chonchocoro, en La Paz. Ese mismo día, otro interno perdió la vida tras recibir una brutal golpiza en la cárcel del municipio de Montero, en Santa Cruz.
El 2 de enero de 2025, en la cárcel de Morros Blancos de Tarija, se asesinó a un reo tras una pelea entre dos grupos que compartían bebidas alcohólicas.