Trump presume de una inversión gigantesca y comienza la revancha

El republicano promocionó ante la prensa un proyecto llamado “Stargate” y prometió inversiones de “al menos 500.000 millones de dólares”

El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció el martes una enorme inversión privada en inteligencia artificial y lanzó una campaña de represalias políticas, un día después de asumir su cargo.

El republicano presentó ante los medios un proyecto denominado “Stargate” y prometió inversiones de “al menos 500.000 millones de dólares” en infraestructura tecnológica en Estados Unidos. Aseguró que esto debería generar “casi inmediatamente más de 100.000 empleos”.

Stargate contará con la participación del especialista en la nube Oracle, la firma de inversiones japonesa SoftBank y la startup de inteligencia artificial generativa OpenAI, cuyos directores ejecutivos estuvieron presentes durante el anuncio en la Casa Blanca. Los tres agradecieron a Trump por su apoyo.

“No podríamos haberlo logrado sin usted”, afirmó Masayoshi Son, de SoftBank, quien elogió la promesa hecha por el presidente de 78 años de llevar a Estados Unidos “a una edad de oro”.

Convencido de que las elecciones de 2020, ganadas por el demócrata Joe Biden, fueron manipuladas, Trump inauguró su segundo mandato con deseos de venganza. Por la noche, declaró haber dado instrucciones a su equipo “para identificar y eliminar activamente a más de 1.000 personas designadas por la administración anterior”.

“No están alineadas con nuestra visión de hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande”, sostuvo en su plataforma Truth Social. Hasta ahora, cuatro personas han sido “DESPEDIDAS”, incluyendo al ex jefe del Estado Mayor Conjunto Mark Milley, la almirante Linda Fagan, y el chef José Andrés, quien había sido reciente condecorado por Joe Biden por sus acciones humanitarias.

En la red social X, el chef afirmó que fue él quien dimitió. La nueva administración también retiró la protección policial a John Bolton, exasesor de seguridad nacional durante el primer mandato de Trump y que se ha convertido en un crítico acérrimo.

Al ser consultado sobre este asunto, Donald Trump describió a Bolton como “estúpido” y manifestó que esta protección no debería ser garantizada de por vida. Además, defendió su decisión de indultar a 1.500 personas condenadas por el ataque al Capitolio el 6 de enero de 2021, que buscaban impedir la llegada al poder de Biden y otorgó conmutaciones a algunos de ellos.

Entre los beneficiados con este gesto de clemencia se encuentran los líderes de dos milicias de extrema derecha, los Oath Keepers y los Proud Boys. “Sus sentencias fueron ridículas y excesivas”, afirmó Trump, quien justo antes del asalto había incitado a sus seguidores asegurando que las elecciones habían sido amañadas, una afirmación infundada que aún sostiene.

Tras los festejos de la vigilia anterior, Trump tuvo una acogida diferente en la catedral nacional de Washington, donde asistió a un oficio religioso tradicional que concluye la investidura. “Le pido que tenga piedad, señor presidente”, le dijo la obispa Mariann Edgar Budde, quien habló sobre el “miedo” que, según ella, predomina en todo el país, y subrayó que “la gran mayoría de los migrantes no son delincuentes”. Trump reaccionó con un gesto de desaprobación.

El presidente decretó una emergencia nacional en la frontera con México para abordar lo que considera una “invasión” de migrantes y decidió continuar la construcción del muro fronterizo. También decidió reactivar el programa “Quédate en México”, que obliga a los migrantes a esperar el resultado de su proceso migratorio del otro lado de la frontera, el cual ha entrado en vigor “con efecto inmediato”, según informó el Departamento de Seguridad Interior (DHS).

Además, Trump decidió aplicar de forma “caso por caso” el programa humanitario (parole) que otorga permiso temporal a migrantes para permanecer en Estados Unidos. Biden lo había utilizado para permitir la entrada de cientos de miles de nacionales de Haití, Cuba, Nicaragua y Venezuela por un período de dos años si contaban con un patrocinador en el país y aprobaban una verificación de seguridad.

Trump también anuló la posibilidad para los migrantes de obtener legalmente una cita a través de una aplicación móvil (CBP One) para llegar a un puerto de entrada.