Nacional

“El que se cree seguro, cuídese de no caer”, dice la Iglesia Católica al pedir reflexión a sus fieles

“El que se cree seguro, cuídese de no caer”, dice la Iglesia Católica al pedir reflexión a sus fieles

En la homilía dominical, monseñor René Leigue también hizo énfasis en la importancia de no culpar a Dios por las dificultades que enfrentan las personas

En su homilía del tercer domingo de Cuaresma, el monseñor René Leigue ofreció un mensaje de aliento y reflexión para todos los creyentes. Durante la misa, subrayó que este es un periodo adecuado para la conversión y un cambio profundo de vida. “Dios nos dice ‘hoy tienen la oportunidad de salir de este momento’”, resaltó.

La conversión, según el monseñor, no se limita a un cambio de vida, sino que implica una transformación en nuestra actitud y comportamiento, lo que nos lleva a actuar de mejor manera y a acercarnos más a Dios. También expresó que el Señor llama a todos los feligreses a reflexionar y rectificar el rumbo de sus vidas.

Leigue enfatizó la relevancia de no culpar a Dios por las adversidades que enfrentamos, explicando que “Él nos ha dado todo lo necesario para vivir en plenitud, pero muchas veces somos nosotros quienes no tomamos responsabilidad”. Remarcó que el llamado es claro: “Debemos asumir nuestra responsabilidad y cuidar todo lo que Dios nos ha dado”.

En su reflexión, el monseñor destacó que, al igual que el pueblo de Israel en Egipto, Dios jamás abandona a su gente. “Dios escucha el sufrimiento, las angustias y el clamor de su pueblo, y está dispuesto a liberarnos”, afirmó. Sin embargo, recordó que esta liberación requiere nuestra participación activa. “Dios quiere sacarnos de nuestros sufrimientos, pero es nuestra decisión dar el paso hacia él y aceptar su ayuda”, resaltó.

Advirtió que “lo peor que nos puede suceder es actuar por nuestra cuenta, como aquellos que no escucharon a Dios y sufrieron las consecuencias de su desobediencia. Si no escuchamos lo que nos dice, nos arriesgamos a alejarnos aún más de la vida que nos ofrece”.

Para concluir, Leigue recordó que nuestra verdadera seguridad no debe fundamentarse en nuestras propias fuerzas, sino en una confianza plena en Dios. “El que se cree seguro, cuídese de no caer”, citó, haciendo referencia a las palabras de San Pablo, subrayando la importancia de renovar nuestra relación con Dios, escuchar su llamada y avanzar en su dirección, confiando en su misericordia y compasión.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *