Maduro reduce la jornada laboral en el sector público para ahorrar energía ante “emergencia climática”

“Estamos haciendo frente a un evento climatológico que afecta el nivel de agua de los embalses que generan la energía eléctrica en la región andina”, indicó el Gobierno de Nicolás Maduro.
El Gobierno de Venezuela notificó el domingo una reducción en la jornada laboral dentro de la administración pública debido a la “emergencia climática” provocada por la disminución de los embalses, que son esenciales para la producción de energía eléctrica en el país.
La nueva medida, que entró en vigor el lunes 24 de marzo, recuerda las decisiones tomadas en los años 2016 y 2018 por el presidente Nicolás Maduro, quien en ese momento alertó sobre la baja en el caudal de la hidroeléctrica Guri, que es responsable del 80% de la energía en el país, como consecuencia de la sequía.
“Producto de la emergencia climática que ha conllevado al aumento de temperaturas a escala mundial, estamos haciendo frente a un evento climatológico que afecta el nivel de agua de los embalses que generan la energía eléctrica en la región andina”, indicó el gobierno en un comunicado.
Por tal razón, “se ajustará el horario laboral desde las 8:00 am hasta las 12:30 pm durante las próximas seis semanas”. También, “se declara el 1×1, que consiste en un día laborable por un día no laborable”.
Así, la atención en las oficinas públicas se limitará a tres días a la semana con jornadas de cuatro horas y media.
Los organismos encargados de servicios esenciales están excluidos de esta medida.
El gobierno instó a la ciudadanía a colaborar con estas acciones, aplicando medidas como el “ajuste de la temperatura de los aires acondicionados a 23°C, el aprovechamiento de la luz natural y la desconexión de aparatos electrónicos” cuando no se estén utilizando.
En 2019, tras un apagón masivo, también se redujo la jornada laboral y se suspendieron las clases en el país.
Los racionamientos eléctricos han sido comunes durante más de 15 años en las regiones del interior. Desde 2019 hasta 2024, el país ha experimentado cortes de electricidad que, según expertos, son atribuidos a la falta de mantenimiento, mientras que el gobierno responsabiliza a sabotajes.